Presentación
El año 2012 ha sido un ejercicio muy significativo en la historia de las tres cajas de la Comunidad Autónoma de Euskadi. Tras su integración en Kutxabank, el 1 de enero nació un grupo bancario líder en sus respectivos mercados locales, con más de 1.200 oficinas, con activos por valor de 69.400 millones de euros y con un patrimonio neto de 4.978 millones de euros.
En este primer año de vida, marcado por la crisis y por los constantes cambios regulatorios en el sector financiero, Kutxabank ha logrado mantenerse entre las entidades más solventes y capitalizadas del sistema. Es significativo destacar que hemos superado todos los requerimientos normativos, sin recurrir a ayudas públicas de ningún tipo, ni a captaciones de capital, ni a instrumentos híbridos.
En un entorno de crisis marcado por una fuerte contracción de la demanda, la economía española ha confirmado las previsiones más pesimistas que auguraban un año extremadamente complejo. 2012 se ha cerrado con una caída del 1,4% en términos de PIB y las consecuencias sociales del desplome se han reflejado en la tasa de paro, que ha alcanzado el 25%.
La economía vasca, por su parte, ha concluido el año con una disminución del 1,4%, si bien es cierto que la tasa de paro en la CAE es casi 10 puntos inferior al resto del Estado. La caída de la economía de los países a los que realizamos nuestras exportaciones permiten prever, además, un difícil 2013 para el sector industrial vasco.
En este entorno económico y financiero de elevada tensión, el grupo Kutxabank ha obtenido un resultado positivo en 2012, lo que supone una excepción en el sector financiero. El beneficio neto consolidado del grupo Kutxabank ha ascendido a 84,6 millones de euros, una vez efectuadas importantes dotaciones por valor de 585 millones de euros para la provisión de riesgos generales y deterioro de activos. CajaSur ha contribuido al balance de resultados con una aportación positiva de 4,8 millones de euros, un 69% más que en el ejercicio precedente.
Los fuertes requisitos de capitalización y de provisiones, unidos al estancamiento en niveles históricamente mínimos de los tipos de interés, al estrechamiento de los márgenes de negocio y a la reducción de la actividad económica, explican el descenso del 65,5% en la generación de beneficios del Grupo, que continúa siendo la entidad privada que mayor inversión social realiza en función de su tamaño.
Quiero recordar que, sólo en los dos últimos ejercicios, hemos destinado más de 1.068 millones de euros a la cobertura de créditos y saneamientos. Este criterio de máxima prudencia nos situó en septiembre como la entidad más solvente entre los principales bancos del Estado, dentro del escenario más adverso que dibujaron los test de estrés de Oliver Wyman.
Esta prudencia se comprende, ante todo, desde el irrenunciable objetivo de que la entidad continúe con una posición patrimonialmente sólida. Estar preparados para hacer frente a los cambios constituye la base de nuestra estrategia, esto es, conservar el derecho a decidir, que está directamente relacionado con el cumplimiento de los requerimientos de solvencia y, por tanto, de la rentabilidad.
En el terreno de la actividad comercial, uno de los retos que se había marcado Kutxabank para el 2012 consistía en homogeneizar la estrategia, el catálogo de productos, los criterios de segmentación y las propuestas de valor a la clientela. En este sentido, se han seleccionado las mejores prácticas de cada una de las entidades que conforman el Grupo, con el objetivo de potenciar la prioridad compartida de ofrecer la mejor atención personalizada y una gama de productos adaptada a las necesidades de sus clientes.
El proceso se ha desarrollado con éxito, como paso previo a la unificación definitiva de las redes comerciales y de los sistemas operativos, que ha concluido recientemente con la convergencia informática.
En lo que se refiere a las participaciones industriales, hemos ordenado y racionalizado la cartera resultante de la integración de las cajas. En ese sentido, hemos redimensionado nuestra participación en Euskaltel y otras compañías. Aparte de razones de carácter contable, es necesario adoptar una estrategia que limite la penalización de la tenencia de la cartera de participadas, como consecuencia de la nueva regulación conocida como Basilea III. También hemos realizado una relevante inversión en la Sociedad Promotora Bilbao Gas Hub, una apuesta estratégica, que responde a una iniciativa de BBK y el Ente Vasco de la Energía, que tiene su sede en Bilbao y prevé crear un importante centro de actividad en el ámbito del gas, colocando a la Comunidad Autónoma de Euskadi en el mapa de ese tipo de actividades.
Kutxabank afronta en 2013 un nuevo ejercicio caracterizado por su complejidad, tanto por la recesión como por la inseguridad regulatoria. A causa de la falta de certidumbre, continuaremos desarrollando una gestión profesional y especialmente prudente a la hora de dotar las provisiones que sean necesarias.
En este escenario, es imprescindible que adoptemos las medidas oportunas para seguir manteniendo uno de los primeros lugares en términos de rentabilidad y solvencia, como garantía de conservar la capacidad de decidir sobre nuestro propio futuro. A ello dedicaremos nuestros esfuerzos y no dudaremos a la hora de tomar las decisiones que sea necesario adoptar.