Perfil de la organización
Gestión del riesgo
Uno de los elementos centrales de la responsabilidad social empresarial del Grupo Kutxabank radica en la puesta en práctica de un modelo de gestión prudente que garantice la supervivencia del Grupo a lo largo del tiempo, y con ella el cumplimiento estricto de sus compromisos financieros con clientes e inversores, así como el mantenimiento de su aportación a la sociedad, tanto a través de la actividad económica e inversora que desempeña como de la actividad social que desarrollan sus accionistas, las fundaciones bancarias, con los recursos procedentes de Kutxabank.
Esta premisa constituye una parte fundamental del planteamiento estratégico del Grupo, recogido en su marco de apetito al riesgo.
Este documento, aprobado formalmente por los órganos de gobierno de Kutxabank, contiene sus principales directrices estratégicas en materia de gestión del riesgo, que marcan los límites que deben ser tenidos en cuenta por los sucesivos planteamientos estratégicos de negocio.
El documento central del marco de apetito al riesgo del Grupo Kutxabank se compone de tres grandes apartados:
- Declaración corporativa del nivel de apetito al riesgo.
- Palancas de influencia sobre el perfil global de riesgo a disposición de sus órganos de gobierno.
- Sistema de monitorización del perfil global de riesgo del Grupo.
Declaración corporativa del nivel de apetito al riesgo del Grupo
A través del marco de apetito al riesgo del Grupo Kutxabank, sus órganos de gobierno definen de manera genérica cuál es el perfil global de riesgo al que desean tender, en línea con el principio de prudencia expuesto al comienzo de este apartado.
Esta declaración genérica se complementa, en busca de un mayor grado de concreción, de la siguiente manera:
- En el ámbito cualitativo, se describen algunas pautas específicas que deben caracterizar el perfil global de riesgo deseado.
- En el ámbito cuantitativo, se selecciona una batería de indicadores de riesgo que, considerados conjuntamente, permiten evaluar la evolución del perfil global de riesgo del Grupo en cada momento, estableciéndose a continuación objetivos estratégicos para los más relevantes, así como diversos umbrales de observación y alerta que activen protocolos especiales de actuación en caso de ser vulnerados.
Las pautas cualitativas y cuantitativas utilizadas para concretar el nivel de marco de apetito al riesgo del Grupo Kutxabank son plenamente reflejadas en las directrices estratégicas de su Plan de Desarrollo de Negocio, que persigue de manera explícita la evolución de los principales indicadores de riesgo hacia los objetivos corporativos establecidos.
Los ejes de actuación de dicho Plan incluyen el crecimiento selectivo y rentable en las principales líneas de negocio del negocio bancario, junto al redimensionamiento de aquellas líneas de negocio que no formen parte de la actividad core del Grupo. También busca la mejora generalizada de los niveles de eficiencia operativa de los principales procesos de la actividad bancaria, así como la adaptación del modelo de gestión del Grupo a un entorno cambiante en el ámbito normativo y tecnológico.
La puesta en práctica de los ejes de actuación previstos en el Plan de Desarrollo de Negocio debe redundar en un progresivo avance de los principales indicadores de riesgo del Grupo hacia los objetivos corporativos establecidos, en materia de:
- Solvencia.
- Liquidez.
- Rentabilidad y eficiencia operativa.
- Calidad de los activos y nivel de saneamiento de los mismos.
En la medida en que la ejecución del Plan de Desarrollo de Negocio haga evolucionar los indicadores de riesgo seleccionados en la dirección marcada por el marco de apetito al riesgo, el Grupo Kutxabank estará más cerca de poder garantizar su objetivo central en este ámbito: la supervivencia del Grupo, y por tanto, de su aportación directa e indirecta a la sociedad.
Palancas de influencia sobre el perfil global de riesgo del Grupo a disposición de sus órganos de gobierno
Después de establecer el nivel de apetito al riesgo deseable para el Grupo Kutxabank, su marco de apetito al riesgo recoge una serie de herramientas disponibles para que sus órganos de gobierno impulsen a la Organización en la dirección marcada.
Entre ellas, cabe destacar las siguientes:
- La definición de una batería de políticas generales de gestión del riesgo de aplicación universal en todo el Grupo y para todos los riesgos.
- La definición de una tipología corporativa de riesgos, que persigue la adaptación de las tipologías estándar del mercado a las particularidades organizativas del Grupo.
- El establecimiento de unos niveles de responsabilidad genéricos para cada tipo de riesgo.
- La asignación de responsables para todos los ámbitos de gestión del riesgo, delimitados por el cruce entre los tipos de riesgo y los niveles de responsabilidad aplicables en cada caso.
- La aprobación de una política formal de información al mercado, que establezca las pautas de actuación a seguir en esta materia.
Sistema de monitorización del perfil global de riesgo del Grupo
La tercera dimensión recogida en el marco de apetito al riesgo del Grupo está dedicada al sistema de monitorización puesto a disposición de los órganos de gobierno para que puedan realizar un seguimiento periódico de la evolución de su perfil global del riesgo, comprobando en qué medida se acercan los indicadores de riesgo seleccionados a los objetivos corporativos establecidos, y si se producen vulneraciones de los umbrales de observación y alerta.
El acceso periódico y recurrente de los órganos de gobierno a la citada información, se articula a través del cuadro de mando corporativo de riesgos del Grupo, que con carácter trimestral proporciona:
- La evolución de la batería central de indicadores de riesgo, que son los sometidos a objetivos y/o umbrales dentro del marco de apetito al riesgo.
- La evolución de la batería de indicadores de seguimiento, que añade a los anteriores otros indicadores de riesgo a título complementario.
- Los informes de soporte donde se explica con detalle la forma de cálculo de cada indicador.
Aportaciones al saneamiento del sector financiero español
Adicionalmente al principio de prudencia aplicado a la gestión de su propio perfil global de riesgo, en los últimos años el Grupo Kutxabank participa de forma activa en el saneamiento del conjunto del sistema financiero español, a través de diversas vías:
- La adquisición en enero de 2011 de los activos y pasivos de la extinta CajaSur, tras un proceso competitivo de adjudicación resuelto en julio de 2010, a través de BBK Bank CajaSur (en la actualidad CajaSur Banco).
- La participación en el proceso de saneamiento de entidades financieras en dificultades mediante la adquisición de activos problemáticos relacionados con el sector inmobiliario a través de la Sociedad de Gestión de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria (SAREB), financiada y participada por el Grupo Kutxabank.
- La dotaciones (tanto recurrentes como extraordinarias) al Fondo de Garantía de Depósitos, mecanismo que está asumiendo, por diversas vías, parte de los quebrantos incurridos por entidades financieras en proceso de reestructuración.