Presentación

La presente Memoria de Sostenibilidad refleja el compromiso que mantiene Kutxabank de comunicar los logros alcanzados en materia de Responsabilidad Social durante 2016 y los retos que afronta de cara al nuevo ejercicio.

El Grupo financiero pone a disposición de toda la sociedad este documento, redactado este año según los estándares internacionales de calidad de la guía G4 de la Global Reporting Iniciative, una de las entidades pioneras en cuanto al rigor y la transparencia en la comunicación.

Desde el pasado año, la guía G4 incide de forma especial en el concepto de la materialidad, lo que implica para Kutxabank el compromiso de mantener un amplio proceso de diálogo con los grupos de interés. De esta forma, el entorno del Banco identifica las materias prioritarias que, en su opinión, debieran ser abordadas por una memoria de estas características, desde la triple óptica ambiental, social y de gobernanza.

En 2016 han sido numerosos los hitos marcados por el Grupo financiero en materia de innovación social. Fineco, la división de Banca Privada de Kutxabank, ha sido una de las primeras gestoras de fondos de todo el Estado en adherirse a los principios de inversión responsable de Naciones Unidas, al haber suscrito este ideario que integra parámetros ambientales, sociales y de buen gobierno en su política de inversiones. Esta relevante comunidad de inversores incorpora criterios ambientales, sociales y de gobernanza corporativa (ASG) en el análisis y en los procesos de toma de decisiones acerca de sus inversiones.

Ese mismo criterio de impacto social positivo está presente en la emisión de cédulas hipotecarias socialmente responsables que realizó el Grupo, y cuyos rendimientos se han destinado en 2016 a la financiación de proyectos de viviendas de protección oficial. Cabe destacar, en ese sentido, que Kutxabank fue la primera entidad financiera del Estado que puso en el mercado los llamados ‘social covered fonds’.

Junto a la participación en actividades de conservación del entorno natural histórico y cultural, el compromiso del Grupo bancario con la sostenibilidad medioambiental se ha visto reflejada en la mejora de la eficiencia energética dentro de su actividad diaria.

En 2016 ha mejorado notablemente la eficiencia energética de las sedes del Banco, principalmente en su sede institucional de Bilbao. La renovación con tecnología LED de la iluminación de las plantas de oficinas del Edificio Gran Vía de Bilbao se ha reducido hasta los 485.174 kWh, frente a los 842.241 kWh que se consumían de media cada año antes de 2014.

También se ha reducido el consumo total de papel, que en dos años ha caído en más de 11.000 kg. En ese sentido, se ha realizado un importante esfuerzo por reducir el número total de cartas impresas que se envían a la clientela –4.318.176 cartas menos que el año anterior–, al dar prioridad a las comunicaciones digitales.

Ha sido, precisamente, un año muy activo en el ámbito de las nuevas tecnologías, que están permitiendo continuar mejorando la comodidad y accesibilidad de nuestro servicio.

Además de actualizarse completamente tanto el servicio de Banca online, como el de Banca móvil, Kutxabank ha jugado un papel decisivo en el lanzamiento de la plataforma única de pagos ‘Bizum’, en la que participa todo el sector bancario. Bizum ha sido integrada dentro de ‘Kutxabank Pay’, una aplicación completamente gratuita que facilita el acceso en un solo clic a todas las Tarjetas Virtuales, a la aplicación Iupay, así como a la Banca móvil de la entidad.

En un mundo globalizado en constante cambio, mantener las aptitudes competitivas de nuestra plantilla continúa siendo prioritario para Kutxabank. Dentro de su estrategia de formación, ha continuado la instrucción en habilidades directivas, financieras y comerciales, con especial énfasis en el marco regulatorio. Se ha mantenido de forma recurrente la formación de la plantilla en aspectos relacionados con el cumplimiento de las obligaciones y los estándares éticos de la empresa.

En materia de relaciones laborales, hemos firmado con la mayoría sindical el nuevo Plan de Igualdad de Kutxabank, que se sustenta en la amplia trayectoria realizada por las Cajas de Ahorros vascas, y cuyo principio fundamental consiste en continuar garantizando la igualdad de oportunidades en el trabajo. El compromiso implica la aplicación de una serie de medidas para avanzar en el respeto por las personas, su dignidad, la integridad y la conciliación de la vida profesional y la vida personal.

Como es de sobra conocido, el contexto actual es extremadamente complejo para el negocio bancario. Sin embargo, a pesar de los múltiples factores penalizadores, Kutxabank ha vuelto a superar con nota todas las pruebas de solvencia y resistencia que se le han planteado en 2016, y se ha situado a la cabeza en términos de solvencia.

Una de las principales consecuencias positivas de este escenario ha sido que Kutxabank ha vuelto a contar con el visto bueno del BCE para mantener su actual política de dividendos. De esta forma, ha podido destinar, por segundo año consecutivo, el 50% del beneficio neto anual a dividendo social.

Un total de 122 millones de euros, con los que las Fundaciones Bancarias accionistas podrán continuar gestionando con estabilidad y confianza sus respectivas Obras Sociales. Es, sin duda, una cifra muy relevante. Más aún si se observa desde una óptica más global: desde la constitución del Grupo bancario hace cinco años, el Banco ha retornado a la sociedad más de 350 millones de euros en forma de dividendo social.

Junto al dividendo social, Kutxabank ha continuado realizando una importante aportación positiva a las economías de su entorno, tanto en términos de generación de PIB –representa el 1% de la economía vasca–, de creación y mantenimiento de empleo, como de recaudación vía administraciones públicas. Así lo refleja el Estudio de Impacto Económico que la Entidad ha realizado en 2016, y cuyas principales magnitudes se resumen en esta memoria anual.

Mantener la recurrencia y sostenibilidad del resultado bancario es una de las obsesiones del equipo directivo que tengo el honor de dirigir. Contamos para ello con las bases marcadas por el Plan de Desarrollo de Negocio, una sólida herramienta de gestión que identifica una serie de palancas de mejora de la posición competitiva de la entidad.

Estamos seriamente implicados en la consecución de los objetivos fijados, a los que estamos dedicando todos nuestros esfuerzos.